En Chile se observa un aumento significativo en la incorporación de mujeres en disciplinas STEM, lo que beneficia el desarrollo de un ecosistema innovador y fortalece la transición hacia energías sostenibles. Este avance, fruto de políticas institucionales y programas específicos, ha sido promovido por diversas entidades vinculadas a Compromiso Minero. Por ejemplo, AIEP ha experimentado un notable incremento de más del 60% en su matrícula femenina en carreras relacionadas con energía, automatización, programación y minería, gracias a becas, apoyos económicos y programas que eliminan barreras históricas. En otras regiones, la Universidad de Antofagasta ha marcado un precedente en acercar la ciencia y la ingeniería a niñas y adolescentes, alcanzando que las mujeres constituyan más del 50% de sus estudiantes en áreas técnicas. De igual manera, la Pontificia Universidad Católica ha logrado cifras inéditas en el Departamento de Ingeniería de Minería mediante programas de exploración vocacional y liderazgo, ampliando las oportunidades para futuras profesionales. Estos resultados evidencian que cuando las instituciones proporcionan apoyo, financiamiento y entornos inclusivos, se fomenta una participación femenina consistente en campos como la minería, automatización, energías renovables y ciberseguridad. Sin embargo, el camino hacia un Chile más diverso en el ámbito científico y tecnológico aún requiere el compromiso conjunto de políticas públicas, institutos educativos y empresas que promuevan ambientes de trabajo inclusivos. Este esfuerzo colectivo es clave para construir un futuro sostenible, equitativo y preparado para los desafíos del siglo XXI.
Autor: Iñigo Socías